Fiesta Co-patronal de la Diócesis

Gran cantidad de fieles y sacerdotes de las distintas parroquias se reunieron en la Iglesia Catedral para celebrar, este jueves 24 de mayo, una solemne Eucaristía, con motivo de la fiesta de María Auxiliadora, co patrona de la Diócesis.  

En esta oportunidad el Nuncio Apostólico del Vaticano en nuestro país: Su Excelencia Reverendísima Monseñor Luiggi Pezzuto presidió la Eucaristía, junto a Monseñor Elías Rauda.

“La juventud es la esperanza de la iglesia…la juventud, no depende de los años, sino del corazón”. Con estas palabras, el Nuncio Apostólico,  dio por iniciada la Santa Misa. “Estoy muy feliz de participar en esta fiesta, que nos une a todos como iglesia” –puntualizó. Mientras, en la Iglesia Catedral, los feligreses continuaban entrando y buscando un espacio para poder escuchar la Palabra de Dios. “Dispongámonos a celebrar con fe y alegría esta fiesta mariana” –concretó Monseñor.

 A lo largo de casi 40 minutos, -tiempo que duró la homilía- Monseñor Pezzuto, hizo un llamado a organizar la vida; partiendo desde los mandamientos de la ley de Dios y a seguir gestando constantemente, la batalla entre el bien y el mal.

“Unos interpretan los mandamientos de la ley de Dios como limitantes de la libertad…en la cultura de hoy en día, se piensa de esa manera, llevando al ser humano, del pensamiento a la acción” -detalló.

“La ley de Dios no limita las capacidades y creatividad del ser humano; al contrario, le da fortaleza para continuar” –prolongó.

 “Si cumplimos los mandamientos de Dios, organizamos nuestra vida personal, familiar, eclesial y social, y obtendremos buenos resultados en nuestra vida” –especificó.

“Si bien es cierto, la batalla entre el bien y el mal empezó en el cielo, aún se libra esa misma batalla en la tierra, en nuestros tiempos y ahora aún más, ya que esta batalla no es solamente dentro de nosotros, sino que está presente en el medio, en nuestras comunidades, parroquias y movimientos” –señaló.

Para finalizar la homilía, Monseñor Pezzuto llamó a la feligresía a ser como María, obediente al Señor y a sus mandatos. “La Virgen María, en el evangelio de hoy, nos muestra un claro mensaje de obediencia hacia Jesús; de hacer lo que él nos manda; a la vez, ella (María) nos invita a renovar esta promesa de fidelidad al Señor –finalizó.

Con un mensaje de esperanza, solidaridad y agradecimiento a todos los presentes y entre alabanzas y aplausos, Monseñor Elías Rauda -Obispo de la Diócesis- fue el encargado de finalizar la celebración.

Cabe señalar, que fue el Papa Pío XII quién proclamó a María Auxiliadora Patrona de la Diócesis  el  28 de octubre de 1949, a instancias de Monseñor Pedro Arnoldo Aparicio Quintanilla sdb., primer Obispo de San Vicente.